Secado solar de alimentos
Introducción
La deshidratación solar es un método de conservación antiguo, barato y saludable. Se trata de extraer el agua de los alimentos mediante calor a temperaturas moderadas. Es uno de los mejores métodos de conservación de alimentos porque ayuda a conservar las propiedades nutritivas.
El agua es uno de los componentes más importantes de los alimentos, y para muchos de ellos, el más abundante.
Podemos decir que el agua es la causante de la naturaleza perecedera de los alimentos.
Deshidratar o secar un alimento consiste en disminuir su contenido de agua hasta un nivel seguro de humedad que permita garantizar condiciones adecuadas para su almacenamiento
El secado solar se refiere al uso de la radiación solar como fuente de energía para disminuir la cantidad de agua presente en un material; es una de las aplicaciones de la energía solar más antiguas.
La exposición al sol de alimentos se realizaba como una técnica de preservación con la finalidad de mantener la disponibilidad de ciertos productos durante épocas con climas adversos o no aptos para el cultivo.
Además de las aplicaciones en los alimentos, el secado solar fue, y sigue siendo, una técnica recurrente para disminuir la cantidad de agua en otros materiales, como ladrillos o bloques, pieles o telas.
Ventajas
El secado de alimentos presenta varias ventajas, entre ellas se encuentran:
- Prolonga el periodo de conservación (12 a 24 meses) sin aditivos.
- Permite aprovechar frutas, verduras o carnes que se han deteriorado y estan a punto de caducar.
- Posibilita el almacenamiento de productos a temperatura ambiente.
- Disminuye el peso y el volumen del producto, facilitando y reduciendo costos de empaque, almacenamiento y transporte.
- Facilita el uso del producto (leche en polvo, café soluble, etc.).
- Aumenta la compatibilidad con otros alimentos en mezclas secas.
- Reduce la producción de residuos.
- Hace posible la disponibilidad constante del producto a lo largo del periodo de conservación, a precios estables.
- En algunos casos mejora las propiedades organolépticas, como el sabor, el olor y la textura.